Mi reseña: 

"A través de la mampara transparente, dentro de la ducha, vi decenas de moscas girando en círculos, a toda velocidad, y formando un espiral negro, un vórtice, que quedaba contenido entre aquellas paredes de cristal, pero que parecía reunir fuerzas y alistarse para volar al cielo y apoderarse de la casa."
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Italia, verano, momento en el que todo ya floreció y renació; estación del año que invita al disfrute, la libertad y la luz. Sin embargo, ese escenario externo y lleno de vida se contradice con lo oscuro y lo escalofriante del interno, de la casa. Una casa que, ante los ojos de lxs vecinxs, está embrujada, maldita; es “la casa ciega”. En esa casa, junto a su madre y su abuela, vive Valentina, una niña de 12 años y narradora de la historia.
“Un Imperio de Polvo” narra un verano que podría haber sido como cualquier otro: descanso escolar, juegos y aventuras, los primeros besos, el primer cigarrillo. Si bien todo eso sucede, también ocurre lo estremecedor.
Todo comienza esa noche en la que Valentina encuentra por primera vez sangre entre sus piernas. Sin embargo, no es la propia la única sangre que brota: la casa sangra por una grieta frente a su cama. Y Valentina decide mantenerlo todo en secreto. Pero al sangrado lo siguen más eventos extraordinarios y bíblicos que, como las plagas, parecen venir a recordarle a las mujeres de la familia que en la vida una carga con culpas que nacieron con la primera de todas, la que nos condenó al pecado para siempre. Y para salvarse, hay que rezar.
Tres generaciones de mujeres en una sociedad católica y consecuentemente conservadora y castigadora. Tres mujeres que quieren deshacerse de pecados y culpas. Una casa que parece recordarles que eso es imposible.
Mucha energía de Escorpio. Disponible en Las Orquídeas de Dolores. Link en bio.

Editorial: Fiordo