Mi reseña:

"Debes amar la química incluso cuando no está funcionando. Debes amar la química incondicionalmente".
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Como lo es la escritora de esta excelente novela que acabo de terminar de leer, la narradora y protagonista de “Química” es una científica dedicada a la química orgánica sintética que trabaja en su doctorado en un laboratorio. Vive en Boston con su novio Eric, ya doctor en química. 
“Química” es una historia de muchas capas. Por un lado, ella es un personaje extraño, como una suerte de “loca de laboratorio” que racionaliza las emociones y no encuentra un modo natural de relacionarse con las personas. Parece no sentirse a gusto con prácticamente nada, ni siquiera un idioma. Nació en China y sus padres se mudaron a Estados Unidos cuando tenía 5 años y la tradición china en su casa tiene mucho peso. Sus padres ejercen mucha presión sobre ella en lo académico y le dan mucho valor a la formación formal. Su madre es distante; su padre violento.
Por otro lado, Eric apuesta a una familia con ella, pero la primera página ya anuncia un conflicto de pareja. Él se quiere casar y tener hijes; ella no. Su mejor amiga sí tiene un bebé y la vida se transforma.
Mientras tanto, la protagonista, con toda su tierna rareza, intenta recorrer el camino a ver la realidad acompañada de una terapia en la que profundiza en su búsqueda, nos cuenta su vida con flashbacks e intenta entender los vínculos más allá de una teoría.
La prosa es divertida y extraña; el uso de los pronombres y artículos deviene del chino, pero te vas acostumbrando a su música. Está muy bien escrita. Una novela con mucha energía de Virgo, Cáncer y Acuario. La recomiendo mucho.

Editorial: Laurel